Casa II
Destaca el monumental volumen de Galarza en la derecha, la vegetación que se integra a la fachada, para luego ser guiado por un espejo de agua a la entrada de la casa.
El interior acogedor y a la vez amplio, con una bella chimenea quasi monolítica de mármol.
La madera se vuelve un elemento distintivo del proyecto y permite la transición entre los espacios.
Una de las partes mas importantes del proyecto fue poder aprovechar las vistas que el terreno nos brindaba.